martes, 23 de septiembre de 2008

Time is never time at all

Ahora no tengo tiempo. En realidad, tengo tiempo pero no para escribir. Tengo que aprovechar este tiempo que todavía es mío, este tiempo al que todavía puedo manipular. Porque en breves comenzará el tiempo de descuento y más adelante llegará el tiempo de sobra, la resaca del tiempo que me hará, tal vez, volver a escribir, volver a trasnochar sin ganas, a dormir en cama de una plaza. Un tiempo que tendrá forma de paréntesis pero peso de punto. Y ni siquiera sé si es y seguido.

sábado, 13 de septiembre de 2008

La gente que: segunda parte

-Dice "mi chica/o" para referirse a una persona que ocupa el lugar de novia/o
-Se despide con la frase "bueno, esta chica, hablamos mañana"
-Dice "chiquis"
-Tiene muñequitos colgando de su celular
-Su celular colgando de su cinturón
-Usa escarbadientes

Me saca las ganas de tener ojos y oidos.

jueves, 11 de septiembre de 2008

El tema se llama "Digiriendo"

Hay un momento en el que todo se vuelve borroso y cualquier gesto de amor, despojado de su sentido más genuino, es percibido como un acto mezcla de agradecimiento con (el término es fuerte pero oportuno) lástima. Es cuando las palabras se convierten en las principales sospechosas, y la duda, en la verdad más absoluta. El mismo instante en el que la espera se cansa de esperar, y el deseo de escuchar y de recibir, se endurece. Ahí, en esa situación, en esta, no me queda más que ceder. Diría “soltar el globo” pero es una frase que detesto. Entonces, cedo. Me dejo llevar. Digo que sí. No pregunto. No hago cálculos. No proyecto. No hablo en plural. Boicoteo cualquier intento de acercamiento. No respiro. No me reconozco. Siento que estoy muerta.

miércoles, 10 de septiembre de 2008

Me Rio

de janeiro, al cubo.
Coming soon.

Warning

Te dije que estaba enamorada de vos
Te dije que te quería
Te dije que estaba perdiendo la paciencia
Te dije que la incertidumbre me estaba agujereando el corazón
Te dije que iba a ser tarde
Te lo dije
Te lo advertí

miércoles, 3 de septiembre de 2008

Confirmado: está en su ADN.

Hay dos temas recurrentes en los almuerzos de mi laburo: el casamiento y las curiosidades del pueblo judío. Ahí la mesa se divide en cuatro (solteras, casadas, católicas, judías) y surgen subtemas que resultan más o menos interesantes según quien tome la palabra. Entonces: el vestido con esta diseñadora top, el alquiler del traje del novio allá, este salón está buenísimo porque no está quemado y es barato, el ritual del Mikbe, las sábanas con el famoso agujero, el por qué de los exámenes médicos pre nupciales. Y acá, en la cuestión que aparenta ser la más trivial, es donde quiero detenerme: debería ser obligatorio (para cualquier mujer, de cualquier religión) y no exclusivamente para los que deciden dar el sí, sino también para cualquier hija de vecino que adquiera novio nuevo. Para saber con quien te estás comprometiendo, sí, para prevenir las ETS, sí, pero sobre todo (sobre todo para las perseguidas como yo) para descubrir potenciales infieles. Ojo, amigas, con el Alelo 334. Dos de cada cinco hombres tienen este gen de la infidelidad. Vayan sacando turno. Perla avisó.

martes, 2 de septiembre de 2008

Hay noches

En las que pienso en lo de la torta y te odio.
Odio que no hayas sido vos.
Sin rencor. Con ganas, pero sin rencor, te odio.
Esta noche pienso en la torta, en vos, en cómo me sentí, y te odio.