lunes, 26 de enero de 2009

Mejor callarlo. Para qué.

Extraño espiarte y verte dormir y acariciar ese pelito suave y revoltoso que tenes y que tanto me gusta aunque vos digas que es una mentira porque está alisado artificialmente. Invitarte a mi habitación y fumar hasta perder la coordinación y volvernos disléxicas. Soñar que sueño con vos. Usar tu maquillaje. Comparar nuestras piernas y reírnos. Despertarme y escuchar tu tos y verte desarreglada y dolorosamente linda. Podría confesártelo: decirte que si a él le gustas, a mí también. Insinuarte que podríamos. Aunque mejor callarlo. Ahora estamos lejos. Para qué.

1 comentario:

Versus dijo...

Me cago en Saturno...quiero saber en quien te inspiraste y no me doy cuenta jaja.
Es hora de irse a la cama...creo

"Vayan saliendo por favor"