viernes, 4 de abril de 2008

Guggenheim

Cinco autos colgando de un techo de cuadriple altura
con luces de colores que destellan como los mismisimos rayos del sol
aguardientes y bebidas espirituosas
la luna llena
mi vaso nunca vacio
soy horrible escribiendo poesia semi ebria, un viernes a la noche, en un barrio de estudiantes en NYC.

4 comentarios:

Siesta escandalosa dijo...

Lo de semi ebria ya es poesía.

Siesta escandalosa dijo...

Vas a abrir esto allá y un comment solitarísimo... No da.
Otro, entonces.

Siesta escandalosa dijo...

Comment de bienvenida (parte I):
Hola, Clau!

Siesta escandalosa dijo...

Comment de bienvenida (parte II):

En este momento no se me ocurre nada.